A veces quisiera entenderte... Y
te juro, me esfuerzo, intentando darle sentido a todas las piezas del
rompecabezas de tu mente.
Me gustaría hablar tu lenguaje y
leer atentamente lo que escribe tu memoria.
Quisiera traducir los silencios
que dejas y las palabras que dices, para así tener el poder de salir victoriosa
en alguna guerra contra ti. Pero generalmente eres tan complicado que no
resulta coherente lo que dices y lo que haces.
A veces, me gustaría esconderme
cuando duermes en ese subconsciente que te hace único entre tantos.
Quisiera entenderte de la A a la
Z. Adivinar esa mueca que dice más de lo que muestra. Saber si piensas en mí
como yo en ti. Conocer qué papel juego en tu juego.
A veces, quisiera meterme en tu
cerebro para saber qué quieres de mí.