Hace poco más de 4 meses decidí cambiar mi vida. Pensé que
cambiar de aires, de espacio y de dirección postal mejoraría muchas cosas.
Decidí dejar en otra ciudad las lágrimas que me dio y metí
en la maleta las sonrisas que me regaló. Me vine con recuerdos bonitos de la
gente que durante tantos años se cruzó en mi camino.. Y son esos recuerdos los que
hoy causan otras tristezas.
Extraño tanto.. Y no por el tiempo que pase sin verlos o
hablarles, sino por todos aquellos momentos en los que hago algo y deseo que
estuvieran conmigo.
La vida sigue, eso dicen, pero a veces solamente pasan los
días con esa mala maña de extrañar.
Hay momentos que sólo se pueden recordar con sensaciones,
que ya no vuelven. Y ahora, que miro para otro lado, me acuerdo de aquella
vista, la de hace días, meses, años, no tan lejana, pero a la vez tan distante,
que sólo se siente con el recuerdo.
Me atrevo a decir, que esto es lo más difícil que jamás
viví.
Los cambios son raros, más aun cuando te sientan bien.

Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarCuando se te presentó esta oportunidad, creo que fui el primero en enterarme, alegrarme y apoyarte la idea de empezar una nueva vida en otro lado... Aunque eso implicara dejar atrás todo, incluso a tus amigos, pero era un riesgo que tenías que correr para probar suerte... Total, lo que necesitabas en aquel entonces era esa oportunidad que se te presentaba y era tomarla o tomarla. Aún cuando te apoyé en todo momento y estaba contento de que te ibas por algo mejor, no podía hacer caso omiso a ese nudo en la garganta que se me formaba cada vez que hablábamos del tema, o cada vez que recordaba lo que implicaría el que te fueras. Hoy, sigo extrañandote como desde el primer día, me haces una falta inmensa y si, estoy un poco triste de no saber cuando nos volveremos a ver... No importa, dejaré a un lado mi egoísmo y pensaré (y sé que es asi), que ahora te va mejor que cuando estabas aquí y eso me alegra. Desde que te fuiste, siempre te he deseado el mejor de los éxitos... Y espero que continúe yéndote cada día mejor. Te amo inmenso, mi negra. Un abrazo, tu maldito miope.
ResponderEliminar